Preá, meu amor.

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terça-feira, 1 de outubro de 2013

Mi Aldehuela querida!


Hoy vuelvo a hablar de Aldehuela, pero és para contar como fue la primera vez que estive en este pueblo de sueños. Eso fue en julio de 1968. Fuimos mi marido Joaquin, mi hijo Leonel que tenia 4 años y yo. Estuvimos unos dias en Godelleta, en casa de Trini y Vicente. Alli vivia también mi suegra Facunda, el tio Nicanor y Amparo, hija de Trini.
Subimos a Aldehuela em meados de julio, para las fiestas de San Miguel, patrono de Aldehuela. Mi suegra fue con Trini y familia en un coche y nosotros fuimos con Serafin, Mercedes, Miguelin y Maria José en otro. Cuando estavamos llegando mi cuñado Serafin me dijo: "Ahy tienes Aldehuela".
Fue la imagen más bella que he visto. El pueblecito sobre un monte. La iglesia despontando maravillosa, imponente. Subimos una callecica, pasamos por la ermita de San Miguel y estavamos en la calle Mayor. Paramos en la casa de Plácido y Teresa, primos de Joaquin. Cuantos recuerdos! Entramos en una sala grande y me deparé con una casa en estilo medieval, hecha de piedras, como todas las otras del pueblo. En la pared havia un cuadro que enseñava un niño que sube una escalera. A cada escalón el ficava más viejo. Cuando llega a los quarenta años esta en el topo de la escalera, entonces empeza a bajar y se vá quedando más viejo a cada escalón.
Bajando la calle Mayor, pasamos por la fuente, el sitio que más me gusta en Aldehuelal, y fuimos a casa de mi suegra, que nos esperaba en la hera, la cual estaba rellena de flores rojas. Mi suegra cogió una y me la dió. La guardé en un libro. Ella era una mujer maravillosa, muy sencilla. Una vez nos escribió una carta y decia: " Quisiera ser una paloma para poder volar sobre el oceano y abraçarlos".
Entramos en la casa y la emoción fue muy fuerte. Era como se yo siempre hubiera vivido ally. La larera, las paredes... todo era muy peculiar. Fui a la habitación de mi suegra y cuando vi la ventana sobre el balcón no pude dejar de llorar. En otros tiempos, la planta baja era para guardar los animales, Acima, la parte donde vivian los de la casa y arriba donde guardavan la cosecha.
Pasamos alli cerca de un mes y a cada dia me sorpreendia con cosas distintas y interesantes.  A Leonel le gustava pasear de burrico.  Cogiamos agua en la fuente y astad hoy me parece el hogar que  más me toca en Aldehuela. Hice amistad con todos del pueblo. Ellos hacen parte de mi vida. És muy bueno volver alli y abrazar a todos.
Fue muy triste el dia que dejamos Aldehuela. Mi marido cumplia 40 años.
Nunca más vi mi suegra. Mi marido aún la vio en 1983, cuando fue con el otro hijo nuestro, el Rodrigo, que tenia entonces 8 años y queria conocer la abuela.
Ella murió en 1987, con 91 años.
Estuve alli otras veces y siempre pasé bien. Me gustaria volver, pero no sé si sera posible.

Um comentário:

  1. Aldehuela para mim é cercada de mistério, se eu pudesse escolher onde viver, seria este o lugar.

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